ABRO HILO
¿Realmente necesitas todo lo que posees? ¿Y si el espacio que ocupa lo que no sirve, impide usar lo que realmente sirve? ¿Por qué concedes tiempo a personas que no aportan nada a tu vida? ¿Has pensado en el número de horas que dedicas al día a mirar Facebook, a ver la televisión o a escuchar el fútbol, en lugar de dedicarlas a tu familia?
¿Por qué no donas esa ropa que hace temporadas que no vistes? ¿Qué razón puede haber en escuchar a quien dice lo que dice sin que por ello mejore en nada de nada tu día a día?
¿Y si viajaras en transporte público en lugar de conducir un coche cuya letra bancaria se lleva una sexta parte de tu sueldo mensual? A lo mejor conoces en el autobús a una mujer que te ame como deseas. O al hombre que supera en todo al marido que tienes en casa y merece ser abandonado (ése mismo que gasta una sexta parte de su nómina en un BMW en lugar de regalarte flores frescas cada viernes). ¿Y si al caminar en lugar de conducir, hallas por fin a la mujer que te haga feliz como mujer o al hombre que te ame como sólo otro hombre como tú sabe amar?
¿Dónde quedaron tus aficiones y hobbies que tanta felicidad te aportaban como ser humano cuando eras más humano de lo que eres ahora? ¿En qué momento sacrificaste tu sueño de realización personal por ayudar a cumplir el sueño de otras personas obedeciendo las órdenes de su ego? ¿Sigues trabajando en aquello para lo que no estudiaste sin dedicar un minuto a mejorar tu situación? ¿Por qué soportas la incompetencia de tu jefe? ¿Cuándo te resignaste? ¿Por qué te rindes tan pronto? ¿De qué huyes, o mejor dicho, de quién?
Te dijeron que por ser mujer, gay, bisexual, transexual o del tipo de seas (o con quien te guste practicar sexo), deberías esconderte, ocultarte o humillarte, y lo aceptas?
¿Por qué te conformas con lo que recibes si mereces mucho más?
¿No crees que en vez de estar leyendo este artículo deberías estar jugando con tus hijos pequeños? O visitando a tu anciana madre en la residencia donde la dejaste hace tanto tiempo que ya ni te acuerdas. O llamando al amigo de quien no sabes nada desde hace meses (ni él de ti). O haciendo el amor a quien más amas (que no tiene que ser tu mujer, ni tampoco necesariamente ser mujer).
¿Eres consciente de lo que te mientes a ti mismo? ¿Sabes que lo que te queda de vida es la única vida que te queda?
¿Te gusta quién eres?
Abro hilo.